domingo, 28 de septiembre de 2008

¿Por qué nos cuesta tanto practicar la empatía?

Hago un esfuerzo consciente de no juzgar ni cuestionar el dolor ajeno. Hay  sentimientos que nos parecen absurdos, y creemos que nosotros en esa situación nos sentiríamos de ésta o aquella manera. Sin embargo, ¿cómo estar tan seguros si no estamos en la situación?
El tener todas las respuesta cuando se trata del dolor ajeno nos distancia, nos hace ver como seres "sobrenaturales," desconectados de la realidad, y por demás insensibles. Tal vez, sea mejor aceptar que no tenemos ni la menor idea de lo que siente la persona en cuestión, y ofrecer nuestro apoyo sin enjuiciar. Cada ser humano es su propio universo, con sus propias reglas y ritmo. Nunca esperemos que los sentimientos de los demás estén de acuerdo con nuestra forma de pensar.  
Hay que ser cuidadosos, porque a veces un comentario bien intencionado, pero con poco tacto, puede llevar a una persona desesperada, mucho más cerca del abismo. Por el contrario, un gesto solidario aun cuando sea silente puede hacer la gran diferencia.

P.D. He tratado de contestar los comentarios del post anterior, pero blogger no me deja publicarlos. No sé que está ocurriendo. Lo siento mucho. Les agradezco sus palabras, gracias.

Imagen vía Infocoponline

6 comentarios:

  1. Reflexionas en una gra verdad. A veces nos pensamos no sólo sobrenaturales, sino también infalibles, conocedores de toda la sabiduria. De los recuerdos más hermosos que tengo es el abrazo de una amiga, que silenciosa, me ofreció su hombro para llorar. Sé que no podía decirme nada, y sé lo agradezco del alma porque hizo todo con ese abrazo y más de las cientos de palabras que escuche ese día.

    Abrazos.

    Argénida Romero

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  2. Hola Sonia, que bueno que di una vuelta por acá. Porque pienso que tu reflexión ha dado realmente en el clavo.

    Al igual que tú me hago la misma pregunta. No nos ponemos realmente en el lugar de los demás y nos creemos superhéroes, haciendo parecer al otro tonto.

    Es muy fácil ver el juego desde afuera y no cuando estamos enredados en el problema. Eso es lo que no entendemos y por eso rompemos a criticar.

    Es como dice Argénida, a veces con quedarse alguien callado al lado de uno y brindando un abrazo es más que suficiente para uno.

    Saludos y te me cuidas mucho!

    Santiago

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  3. pues si, nunca sabemos que haríamos, puesto que no somos la otra persona, ni tenemos sus experiencias vividas, ni...
    en todo caso, lo único que nos queda es, ser amigos :)

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  4. Yo soy de esas que muchas veces prefiero que me sostengan la mano en silencio, es mucho más reconfortante.

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  5. Argenida, es bueno también escuchar las palabras, si son las correctas para la ocasión... las palabras pueden crear o destruir. Si un abrazo siempre cae bien.

    Santiago, la cuestión es mucho más complicada de lo que muchos quieren creer. Para muchos es fácil opinar/criticar desde afuera.

    Sandy, así es. Es bueno tratar de ser amigos, aunque muchos no entienden lo que eso significa.

    Ginnette yo también me anotó para el apretón de manos.

    Abrazos amigos!

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  6. Gracias, personalmente necesitaba leer lago asi. Saludos.

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